La diferencia entre el precio de oferta de los pisos de segunda mano y el presupuesto que está dispuesto a desembolsar el potencial comprador era de 27.810 euros al cierre de 2014 -el 25% del valor medio del piso-, un 7,5% más que un año antes, según un estudios de pisos.com.
Si los vendedores han ajustado sus precios un 8,5% durante el pasado año, la demanda sigue lastrada por la mala situación del empleo, la lenta recuperación del crédito y la búsqueda de oportunidades inmobiliarias a precios por debajo del mercado.
El portal inmobiliario señala que en 2009 la diferencia entre los precios que ofrecían los propietarios y la contraoferta del comprador era del 55% del valor del piso. Esta diferencia se redujo en 2013 al 20%, pero ha vuelto a incrementarse hasta el 25% en 2014.
Expectativas y precios
Por otra parte, si en 2013 un piso tipo a la venta en España costaba 153.360 euros, el alcanzado en 2014 fue de 140.310 euros, a mucha distancia de los 220.500 euros de 2009.
En cuanto a las expectativas de gasto de la demanda, entre 2009 y 2011 la vivienda ideal tenía 90 metros cuadrados y costaba 142.500 euros de media, pero entre 2012 y 2013 el presupuesto cayó a 127.500 euros, manteniendo la misma superficie. En 2014, se ha dado una nueva vuelta de tuerca, bajando hasta los 112.500 euros por una casa del mismo tamaño.
Por regiones, nueve comunidades autónomas redujeron su presupuesto de partida a la hora de buscar una casa en venta en 2014 y sólo Extremadura lo subió. El precio más elevado de salida lo arrojó el País Vasco, a pesar de reducirse en un año de los 337.500 euros a los 217.500 euros.
En el lado opuesto, Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Murcia contaron con precios iniciales de 67.500 euros de media. Por otro lado, las comunidades autónomas donde oferta y demanda están más cerca son Navarra (3%) y País Vasco (8%), mientras que los mayores desajustes se dieron en Murcia (51%), Andalucía (45%), Baleares (45%) y Madrid (43%).
La brecha se reduce al 13% en el alquiler
Por otro lado, la diferencia entre el precio inicial de los alquileres y las rentas que indican los futuros inquilinos en sus búsquedas era del 13% al cierre de 2014, frente al 27% de hace cinco años.
La renta media que buscaba la demanda hasta 2013 era de 450 euros mensuales por un piso de 90 metros cuadrados, frente a los 350 euros de 2014. En cuanto a la oferta, se ha pasado de un piso tipo de alquiler de 571 euros mensuales en 2010 a uno de 394 euros en 2014. Los 177 euros de diferencia suponen un ahorro anual para el inquilino de 2.124 euros.
Fuente: http://www.eleconomista.es/