Los andamios cubren el último de los inmuebles acristalados con vistas a la Dársena sin restaurar. Patrimonio no ofrece noticias sobre su declaración como Bien de Interés Cultural.
Mientras las galerías de La Marina continúan esperando a que el Gobierno gallego resuelva si abre o no el expediente de declaración de Bien de Interés Cultural, tal y como propuso el vicerrector de Infraestructuras de la Universidad, Xosé Lois Martínez, al bipartito, el inmueble que se alza sobre el restaurante Noray, junto a Puerta Real, se ha vestido con andamios para reformar su fachada y dejar así de ser considerado como el último inmueble acristalado pendiente de reforma frente a la Dársena
La restauración del último edificio acristalado que faltaba por adecentarse en la avenida de La Marina y de Montoto ya está en marcha. Se trata de la antepenúltima de las famosas galerías con vistas a la Dársena coruñesa, junto a Puerta Real, en cuyo bajo acoge al restaurante Noray, foco del incendio que tuvo lugar el pasado 24 de febrero de 2009 y que calcinó la primera de las cuatro alturas del inmueble construido en 1884, el número 15 de la plaza de María Pita.
El gobierno de la anterior Xunta inició en mayo de 2008 los trámites para declarar las tradicionales galerías como Bien de Interés Cultural; sin embargo, más de dos años después, sigue sin haber novedades sobre la propuesta del arquitecto y vicerrector de la Universidad, Xosé Lois Martínez, que planteó al bipartito la conveniencia de esta protección por su singularidad, su aportación arquitectónica y urbanística y, en definitiva, por conformar un paisaje urbano excepcional.
Entre la veintena de edificios acristalados que conforman el balcón del puerto, el que ahora se está reformando presume de una fachada y un zócalo de sillería y se levanta mediante una estructura de hormigón y madera, un material que acrecienta la necesidad de protección de estos inmuebles ante posibles incendios como el ocurrido la mañana del martes de Carnaval del pasado año cuando el fuego se abrió paso por la estructura de madera desde la cocina del restaurante hasta el cuarto piso y el ático.
La ley del patrimonio histórico de Galicia estipula que en el caso de los monumentos también se protege su entorno inmediato y no se autoriza nada que impida su "contemplación, apreciación o estudio". De este modo, la propuesta de Xosé Lois Martínez, que establecía declarar monumento histórico artístico los dos tramos de galerías -entre Puerta Real y la calle Luchana, construidos entre finales del siglo XIX y principios del XX- afectaría también a la fachada posterior, dividida entre la calle Riego de Agua y la plaza de María Pita.
El Plan Especial de Protección y Reforma Interior de la Ciudad Vieja y Pescadería (Pepri) otorga al primer tramo de edificios con galería, desde Puerta Real hasta la calle Fama, la máxima protección: la monumental. El segundo tramo, desde la calle Fama hasta Luchana, tiene protección integral. La Consellería de Cultura, preguntada en varias ocasiones sobre el estado de la tramitación del Bien de Interés Cultural, no aclara si la propuesta del vicerrector elogiada por el bipartito será finalmente una realidad.
En caso de que la respuesta fuese positiva, las galerías ubicadas frente a la Dársena pasarían a regirse por la ley del patrimonio cultural de Galicia que, en el caso de los monumentos, estipula que no podrán realizarse obras exteriores o interiores, instalaciones o cambios de usos que afecten directamente a los inmuebles, a sus elementos o a "su entorno delimitado", sin la autorización expresa del Gobierno gallego.
Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/
Mientras las galerías de La Marina continúan esperando a que el Gobierno gallego resuelva si abre o no el expediente de declaración de Bien de Interés Cultural, tal y como propuso el vicerrector de Infraestructuras de la Universidad, Xosé Lois Martínez, al bipartito, el inmueble que se alza sobre el restaurante Noray, junto a Puerta Real, se ha vestido con andamios para reformar su fachada y dejar así de ser considerado como el último inmueble acristalado pendiente de reforma frente a la Dársena
La restauración del último edificio acristalado que faltaba por adecentarse en la avenida de La Marina y de Montoto ya está en marcha. Se trata de la antepenúltima de las famosas galerías con vistas a la Dársena coruñesa, junto a Puerta Real, en cuyo bajo acoge al restaurante Noray, foco del incendio que tuvo lugar el pasado 24 de febrero de 2009 y que calcinó la primera de las cuatro alturas del inmueble construido en 1884, el número 15 de la plaza de María Pita.
El gobierno de la anterior Xunta inició en mayo de 2008 los trámites para declarar las tradicionales galerías como Bien de Interés Cultural; sin embargo, más de dos años después, sigue sin haber novedades sobre la propuesta del arquitecto y vicerrector de la Universidad, Xosé Lois Martínez, que planteó al bipartito la conveniencia de esta protección por su singularidad, su aportación arquitectónica y urbanística y, en definitiva, por conformar un paisaje urbano excepcional.
Entre la veintena de edificios acristalados que conforman el balcón del puerto, el que ahora se está reformando presume de una fachada y un zócalo de sillería y se levanta mediante una estructura de hormigón y madera, un material que acrecienta la necesidad de protección de estos inmuebles ante posibles incendios como el ocurrido la mañana del martes de Carnaval del pasado año cuando el fuego se abrió paso por la estructura de madera desde la cocina del restaurante hasta el cuarto piso y el ático.
La ley del patrimonio histórico de Galicia estipula que en el caso de los monumentos también se protege su entorno inmediato y no se autoriza nada que impida su "contemplación, apreciación o estudio". De este modo, la propuesta de Xosé Lois Martínez, que establecía declarar monumento histórico artístico los dos tramos de galerías -entre Puerta Real y la calle Luchana, construidos entre finales del siglo XIX y principios del XX- afectaría también a la fachada posterior, dividida entre la calle Riego de Agua y la plaza de María Pita.
El Plan Especial de Protección y Reforma Interior de la Ciudad Vieja y Pescadería (Pepri) otorga al primer tramo de edificios con galería, desde Puerta Real hasta la calle Fama, la máxima protección: la monumental. El segundo tramo, desde la calle Fama hasta Luchana, tiene protección integral. La Consellería de Cultura, preguntada en varias ocasiones sobre el estado de la tramitación del Bien de Interés Cultural, no aclara si la propuesta del vicerrector elogiada por el bipartito será finalmente una realidad.
En caso de que la respuesta fuese positiva, las galerías ubicadas frente a la Dársena pasarían a regirse por la ley del patrimonio cultural de Galicia que, en el caso de los monumentos, estipula que no podrán realizarse obras exteriores o interiores, instalaciones o cambios de usos que afecten directamente a los inmuebles, a sus elementos o a "su entorno delimitado", sin la autorización expresa del Gobierno gallego.
Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/