Reyal Urbis registró una pérdida neta de 51,85 millones de euros en el primer trimestre, frente a los ''números negros'' de 22,51 millones contabilizados en el mismo periodo de 2009, informó la inmobiliaria.
La cifra de negocio se elevó un 78% entre los pasados meses de enero y marzo, hasta los 260,89 millones de euros, mientras que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue negativo en 14,07 millones, lo que contrasta con el importe positivo de 14,13 millones de un año antes.
A cierre de marzo, la compañía controlada y presidida por Rafael Santamaría registraba un endeudamiento neto de 4.372 millones, un 11% menos que un año antes. No obstante, el pasado viernes 14 de mayo Reyal logró cerrar la refinanciación de esta deuda. El acuerdo supuso materializar la venta de una serie de activos a sus bancos acreedores y reducir por tanto el pasivo total a 3.750 millones.
En paralelo a esta reestructuración de deuda, Reyal mantuvo su política de reducción de costes, en la que destaca el recorte del 31% realizado en la plantilla de la empresa ligada a la actividad promotora.
De esta forma, a la conclusión de marzo, la inmobiliaria contaba con una plantilla de 656 empleados (incluidos los de Rafael Hoteles), un 17% menos en comparación a un año antes.
'Stock' de viviendas
En cuanto a la evolución de negocio, a cierre del primer trimestre del año la inmobiliaria contaba con una cartera de 3.000 viviendas en construcción o terminadas, de las que menos de la mitad (unas 1.300 unidades) están prevendidas. Se localizan en más de treinta ciudades de España y Portugal.
La actividad de promoción y venta de viviendas siguió constituyendo su primera fuente de ingresos, con 106,55 millones en el primer trimestre, un 32% más respecto a un año antes. Reyal elevó un 33% el importe obtenido por entrega de viviendas prevendidas en trimestres anteriores.
En cuanto a la división de alquiler de su cartera de patrimonio, facturó 5,59 millones en los tres primeros meses, un 30% menos, como consecuencia de las ventas de activos. La división de hoteles aportó 7,91 millones, un 1,6% menos.
Además, Reyal ingresó 98,90 millones por la venta de activos de patrimonio y otros 37,94 millones por la enajenación de suelo. En este último caso, tiene comprometidas y pendientes de escriturar ventas por importe de otros 13 millones de euros.
Fuente: http://www.cincodias.com/
La cifra de negocio se elevó un 78% entre los pasados meses de enero y marzo, hasta los 260,89 millones de euros, mientras que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue negativo en 14,07 millones, lo que contrasta con el importe positivo de 14,13 millones de un año antes.
A cierre de marzo, la compañía controlada y presidida por Rafael Santamaría registraba un endeudamiento neto de 4.372 millones, un 11% menos que un año antes. No obstante, el pasado viernes 14 de mayo Reyal logró cerrar la refinanciación de esta deuda. El acuerdo supuso materializar la venta de una serie de activos a sus bancos acreedores y reducir por tanto el pasivo total a 3.750 millones.
En paralelo a esta reestructuración de deuda, Reyal mantuvo su política de reducción de costes, en la que destaca el recorte del 31% realizado en la plantilla de la empresa ligada a la actividad promotora.
De esta forma, a la conclusión de marzo, la inmobiliaria contaba con una plantilla de 656 empleados (incluidos los de Rafael Hoteles), un 17% menos en comparación a un año antes.
'Stock' de viviendas
En cuanto a la evolución de negocio, a cierre del primer trimestre del año la inmobiliaria contaba con una cartera de 3.000 viviendas en construcción o terminadas, de las que menos de la mitad (unas 1.300 unidades) están prevendidas. Se localizan en más de treinta ciudades de España y Portugal.
La actividad de promoción y venta de viviendas siguió constituyendo su primera fuente de ingresos, con 106,55 millones en el primer trimestre, un 32% más respecto a un año antes. Reyal elevó un 33% el importe obtenido por entrega de viviendas prevendidas en trimestres anteriores.
En cuanto a la división de alquiler de su cartera de patrimonio, facturó 5,59 millones en los tres primeros meses, un 30% menos, como consecuencia de las ventas de activos. La división de hoteles aportó 7,91 millones, un 1,6% menos.
Además, Reyal ingresó 98,90 millones por la venta de activos de patrimonio y otros 37,94 millones por la enajenación de suelo. En este último caso, tiene comprometidas y pendientes de escriturar ventas por importe de otros 13 millones de euros.
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