El presidente de la patronal de los promotores y constructores de España (APCE), José Manuel Galindo, ha vuelto hoy a la carga contra la entrada en el mercado inmobiliario de las entidades financieras al denunciar que los descuentos en la venta de viviendas que ofrecen los bancos, de hasta el 40%, "no siempre se traducen en buenas oportunidades de compra", porque en ocasiones afectan a productos de menor calidad que otros que están en el stock de los promotores con rebajas del 10%.
Además, ha insistido en que existe una demanda "localizada" que podrá acceder al stock de 750.000 viviendas sin vender en manos de los promotores "siempre que haya una cosa que se llama dinero, que se llama crédito, y que está absolutamente seco". Durante el XXVIII Coloquio Nacional de la APCE, titulado La vivienda: Problema y Solución, Galindo ha apuntado que "parece mentira" que "todos" los agentes del mercado no sean capaces de hacer coincidir oferta y demanda.
Por lo que respecta a su negociado, ha asegurado que los promotores han realizado el ajuste de precios que han podido "dentro de sus límites", cuestión que ha aprovechado para lanzar otro dardo a la banca añadiendo que las entidades financieras "podrían ayudar" ajustando los márgenes que quedan. En este sentido, ha advertido a los promotores de la necesidad de aprender la principal lección que puede extraerse de la crisis, que es su "vulnerablidad", su incapacidad para "autorregularse" y su prociclicidad.
300.000 millones de deuda
Desde el bando de la banca, el presidente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), Santos González, ha afirmado que los promotores "no pueden pagar" su deuda estrucural, lo que a su vez "está afectando al rating de las entidades financieras". En su opinión, hacer frente a este deterioro de los activos requiere "buscar una medida" a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) o el Banco de España. "Lamento no dar buenas noticias", ha admitido en el mismo acto antes de advertir de que no se puede hacer "borrón y cuenta nueva".
Extremo que no niegan los promotores. Según Galindo, el sector acumula una deuda por crédito promotor que supera los 300.000 millones de euros, un 11% más que hace dos años, lo que supone unos intereses de 15.000 millones. El pago de esta deuda, con un peso de la producción de 170.000 millones de euros, "es difícil" ha admitido. No obstante, ha defendido que no necesitan "ayudas directas" del Ejecutivo. En su lugar, ha reclamado al Gobierno "medidas estructurales", como reformar el marco regulatorio del suelo; de la rehabilitación, actividad que en la actualidad "no sería posible" desarrollar a gran escala; y del alquiler, para eliminar "asimetrías" entre las ayudas a propietarios e inquilinos.
En sus críticas, Santos González ha apuntado también al Gobierno, al que ha acusado de no poner "los mimbres necesarios para solucionar el aturdimiento financiero del sector", que "se está jugando su viabilidad". Según ha añadido, no solo se pueden echar las culpas al sistema financiero", ya que también "tiene que ver con su proceso de reestructuración".
Además, el presidente de la AHE ha defendido que las informaciones que se generan sobre la evolución de los precios de la vivienda están provocando una "pérdida de referencias de valor y una contención adicional de la demanda", pese a lo cual el mercado "se está moviendo", como demuestra, según ha añadido, una mejora en la subrogaciones.
Fuente:www.elpais.com