El Grupo Parlamentario Socialista ha remitido al Congreso de los Diputados una proposición de ley de medidas de fomento del alquiler estable de vivienda cuyo objetivo es incrementar la oferta disponible de casas en régimen de arrendamiento. Con ello, persigue conseguir que los precios moderen su rally alcista y que entre alquilar una vivienda de manera permanente o estable o para turistas, la primera sea la opción preferida para la mayoría de los propietarios.
La secretaria de Ordenación Territorial y Políticas de Vivienda del PSOE y exministra del ramo, Beatriz Corredor, fue la encargada este viernes de presentar la propuesta a los medios. Entre las medidas que plantea destaca una batería de incentivos fiscales para animar a que más propietarios saquen sus viviendas al mercado, que en la actualidad atraviesa un momento de fuerte escasez de oferta y precios al alza. Corredor ha recordado que desde 2013 hasta ahora las rentas de alquiler en las grandes ciudades han aumentado más del 20% en algunos casos.
Así, el PSOE considera necesario promover un sistema público de precios de referencia por zonas, o lo que es lo mismo, que los ayuntamientos, con la información que obtienen de las fianzas que depositan los inquilinos, elaboren unos estudios donde puedan comprobar cuáles son los precios medios que cobran los propietarios por zonas.
Una vez obtenida esa información, los socialistas plantean que a los caseros que respetaran esos precios de referencia y no alquilaran con rentas superiores se beneficien de una reducción en la declaración de sus ingresos en el IRPF del 60%.
Si además esos mismos propietarios hubiesen realizado obras en la casa para mejorar la eficiencia energética, la reducción fiscal se incrementaría un 10% más hasta llegar al 70%.
Y si el inquilino de esa vivienda fuese un joven de entre 18 y 30 años con ingresos bajos, la reducción fiscal llegaría al 100%, de forma que los ingresos obtenidos estarían exentos de pagar IRPF.
El plan del PSOE contempla asimismo recuperar la desgravación fiscal para los inquilinos con una base imponible inferior a 30.000 euros anuales. De esta forma, podrían deducirse un 10,05% de las cantidades que paguen como alquiler.
Otro de los planteamientos propuestos es eximir del pago del IRPF a todos aquellos contribuyentes que cuando vendan una casa, destinen parte del dinero obtenido a la compra de otra vivienda y destinen esta segunda al alquiler durante un plazo de al menos 10 años.
En materia de contratos de arrendamiento, Corredor se mostró partidaria de volver a la situación que contemplaba la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) antes de que fuera reformada en 2013. En este sentido, cree más favorable para el mercado recuperar los contratos de cinco años más una prórroga de tres, frente a los tres años más uno que fijó a partir de entonces la LAU.
En cuanto a cómo proceder para actualizar las rentas, en lugar del acuerdo entre las partes que fija la ley actual, los socialistas ven más adecuado volver a una revalorización en función de la evolución del IPC.
Con todo ello, se busca que a todos aquellos que aún mantienen viviendas cerradas o vacías, "les compense ponerlas en el mercado del alquiler, y que sea alquiler residencial en lugar de turístico", han explicado desde el PSOE.
Los socialistas también proponen limitar las finanzas o los avales adicionales que un arrendatario tiene que prestar para lograr alquilar una vivienda. En la actualidad, según Corredor, existen casos en los que los propietarios piden cantidades de fianza que pueden llegar a alcanzar hasta los 4.000 eurospara alquilar un inmueble, lo que deja fuera a muchos colectivos vulnerables como son los jóvenes recién incorporados al mercado laboral.
Asimismo, según la propuesta, la limitación de las fianzas adicionales o de los avales bancarios sería mayor cuanto más barato sea el alquiler. De este modo, se beneficiará más a los inquilinos que tengan menor poder adquisitivo.
Entre las propuestas, el grupo socialista también cree que los alquileres turísticos deberían quedar fuera de la LAU. Solo cuando el arrendamiento sea de 15 días o más y no incluya ningún tipo de servicio adicional (desayuno, limpieza) similar al que prestan los hoteles se regulará por la LAU.
De esta manera, si la cesión temporal es para arrendamientos inferiores a 15 días o para cesiones con servicios equiparables a los de los que ofrecen los hoteles, los alquileres turísticos quedarán fuera de la Ley de Arrendamientos Urbanos y deberán las comunidades autónomas quienes regulen sus normas de funcionamiento.
Fuente: http://www.cincodias.com/