Todos los estudios elaborados sobre tendencias del mercado inmobiliario sin excepción apuntan que este recién estrenado 2018 será mejor que el ejercicio anterior, si bien los expertos advierten contra los riesgos que siguen acechando a esta actividad.
El consejero delegado de Sociedad de Tasación Juan Fernández-Aceytuno, presentó este jueves el informe de esta compañía en el que prevé que los precios de las casas suban este año un promedio del 5,5%, las ventas mejoren un 14,1% y las hipotecas lo hagan un 9,4%.
Hasta aquí todo apunta a que el sector podrá cerrar un nuevo ejercicio con todas sus variables creciendo a buen ritmo y, lo que es mejor, sin que por el momento pueda hablarse de que se esté gestando una nueva burbuja. Sin embargo, Fernández-Aceytuno advirtió que no conviene perder de vista algunos indicadores y hechos concretos que ya se están empezando a producir y que pueden estar anticipando situaciones como las del pasado que no quiere nadie que se repitan.
Una de esas circunstancias es la falta de personal cualificado en los trabajos de construcción ahora que la promoción inmobiliaria remonta el vuelo. El consejero delegado de Sociedad de Tasación reveló que algunas obras se están teniendo que parar por falta de mano de obra, lo que no solo retrasa los plazos de entrega de las viviendas, sino que puede provocar un incremento de los precios de los pisos. "La mayoría de los mejores profesionales que había en el anterior ciclo alcista se ha jubilado o se ha reconvertido en otra actividad, por lo que a las promotoras les está costando encontrar personal capacitado para la obra". explicó.
En cuanto a la evolución del precio de los materiales, el CEO de la tasadora se mostró más cauto, si bien avanzó que algunos de ellos también se están encareciendo en los últimos tiempos.
Otro de los riesgos que puede provocar distorsiones en el buen funcionamiento del mercado fue la parálisis de demasiados planes urbanísticos, lo que a su vez provoca escasez de suelo finalista para promover nuevas viviendas. "Toda restricción de la oferta, acaba provocando una burbuja", insistió. Por este motivo, recomendó que en la medida que sea posible y allí donde se constate que existe demanda de vivienda, lo deseable es que los tiempos del proceso urbanístico sean lo más ágiles posibles.
El consejero delegado de esta tasadora se mostró una vez más preocupado por la dificultad de numerosos jóvenes para acceder a una casa en propiedad y reclamó ayudas públicas capaces de paliar esta situación. Pero al mismo tiempo advirtió contra los efectos que acaban teniendo algunas subvenciones directas, como ya ocurrió en el pasado, cuyas cuantías al final se repercuten en el precio final de las viviendas. Ante la próxima aprobación del nuevo plan de vivienda que pretende sacar adelante el Ministerio de Fomento, Fernández-Aceytuno volvió a demandar la creación de un parque de vivienda protegida en alquiler y más políticas de regeneración urbana. "La política debería orientarse más a qué debe hacer a largo plazo y no ser tan cortoplacista", añadió.
Sobre el actual momento por el que atraviesa el mercado del alquiler, el informe de Sociedad de Tasación avisa de que es posible que las elevadas rentabilidades que se registran en la actualidad constituyan una burbuja "efímera", ya que en algunas zonas se empieza a detectar que el alza de las rentas toca techo, ya que el alquiler es muy volátil a determinados factores.
Uno de ellos es la limitación de los precios de los alquileres que demandan algunas formaciones políticas a imagen y semejanza de lo ocurrido en otras ciudades europeas. "Nosotros consideramos que en el alquiler, el camino a seguir no puede ser el de poner límites. Cada propietario debe ser libre de alquilar su vivienda al precio que desee y luego que se cumpla la ley y pague los impuestos que deba pagar", aclaró. En este sentido, defendió que con más alquiler España sería un país más rico porque el arrendamiento favorece la movilidad laboral, y es un mercado más líquido. Ahora bien, demandó que se profesionalice y se garantice la seguridad jurídica para que cada vez más empresas deseen invertir en él.
Respecto a quienes piensan que por disponer de una vivienda en propiedad no tendrán problemas para completar su pensión futura, en el caso de un recorte de estas prestaciones, Fernández-Aceytuno fue claro. "Ni vender y quedarse disfrutando del usufructo es tan fácil y la hipoteca inversa es un producto de alto riesgo", apostilló.
Fuente: http://www.cincodias.com/