La proliferación de los pisos turísticos está cambiando el paisaje urbano de Madrid. Hasta el momento, este fenómeno se había estudiado desde una visión económica, pero pocas veces habíamos tenido oportunidad de visualizar, a través de cartografías y mapas de calor, cómo está afectando al tejido urbano y la competencia que existe por el suelo.
La Casa Encendida presentó el día 24 de octubre de 2017, en un encuentro con expertos, el nuevo Atlas de la Turistificación, un novedoso proyecto comisariado por la arquitecta Ariadna Cantis, en colaboración con Pablo Martínez y Mar Santamaría, directores de la firma 300.000 kms.
Este trabajo analiza, a partir de los datos obtenidos de Google Trends, cómo se han transformado los intereses de los turistas en los últimos años, y la distribución del alojamiento p2p en la ciudad de Madrid, la segunda, después de Londres, donde existe mayor concentración de pisos turísticos en pocos usuarios, según los datos proporcionados por el portal Inside Airbnb. Fenómenos que se muestran claramente en mapas temáticos.
Concretamente el Atlas contiene cinco mapas: el de los lugares por dónde pasean los turistas y el tipo de alojamiento en el que duermen, los servicios básicos, la competencia que existe por el suelo y el desplazamiento que en muchas zonas provoca esta problemática.
De gran interés resulta, asimismo, la combinación de los datos con otras informaciones urbanas tomadas de un amplio número de fuentes como el Catastro, el INE, Datos Abiertos Madrid o el portal Fotocasa.
El Atlas nos ayuda a comprender como la competencia por el suelo no es heterogénea en todo Madrid, sino que se produce en zonas céntricas de la ciudad donde hay una mayor proporción de vivienda de alquiler, con pisos de peor calidad (se acaban convirtiendo en alojamientos turísticos) y donde el coste de la vida es mayor (ingresos-alquiler).
Circunstancias que, según los expertos, llevan a una presión económica ya que existe mayor población con posibilidad de ser expulsada. Así, por ejemplo, en Lavapiés el porcentaje de vivienda en alquiler llega a un 70%.
"Se observa, también, como en algunos lugares la proporción de alquileres de uso turístico es mucho mayor que la de alquileres convencionales, no siendo proporcional la oferta de pisos de Fotocasa a la oferta de Airbnb", explicó Pablo Martínez.
Para el arquitecto, urbanista y sociólogo, José María Ezquiaga, estamos ante una nueva actividad económica que debe ser regulada desde abajo (municipios, planes urbanísticos...). "Hemos de pasar de la visión de Código Civil a una visión urbana repensada de manera contemporánea", remarcó.
Fuente: http://www.elmundo.es/