Es complicado conocer con exactitud el futuro que le espera al mercado la vivienda en España y otros países desarrollados. El patrón demográfico actual muestra que en 2015 se produjo un descenso de 146.959 personas con respecto al año anterior, una tendencia que vive España desde 2012. Si la población decrece o se estanca, ¿quién comprará las viviendas del futuro? Muchas son las posibles respuestas, pero los expertos de Credit Suisse argumentan que la más posible es que la demanda de vivienda se hunda.
Tal y como explican los expertos de la entidad suiza en el último informe sobre el mercado de la vivienda (en Suiza), en la actualidad la demanda se sostiene gracias los bajos tipos de interés, que permiten a los agentes pedir hipotecas con unos costes relativamente reducidos. Sin embargo, gran parte de esta demanda de vivienda está llegando de la mano de personas que se encuentran en la segunda mitad de sus vidas, mientras que los más jóvenes optan en mayor medida por el alquiler.
"La demanda de vivienda sale a flote por personas mayores. El propietario medio en Suiza a día de hoy tiene 57 años. A medida que la generación del baby boom logran un mayor asentamiento financiero, serán cada vez más las viviendas en manos de estas personas que dominarán el mercado de la propiedad residencial", sostiene el informe de Credit Suisse.
Los jóvenes optan por alquilar
"Por el contrario, las familias más jóvenes siguen optando en mayor medida por el alquiler. Se está incrementando la brecha entre generaciones. Como consecuencia, el mercado de la vivienda residencial puede sufrir fuertes presiones, sobre todo cuando estos jóvenes (una generación mucho más pequeña que la del baby boom), reemplace a la que ahora está sosteniendo la demanda", explican los expertos.
Número de propietarios de vivienda por edad (Suiza)
Y es que las generaciones actuales no sólo son inferiores en número a la del baby boom, sino que además son los herederos de esta última, por lo que muchos de ellos no necesitarán comprar una nueva vivienda puesto que heredarán la de sus padres, o si ya son propietarios podrían decidir ponerla en venta o alquiler, aumentando así la oferta de viviendas sin el correspondiente incremento de la demanda.
"De 2018 en adelante, el cambio demográfico será un factor de debilidad para la demanda esperada, en unos años podríamos ver una caída de un tercio de la demanda de hoy", sentencian los economistas de Credit Suisse.
Esta situación podría extrapolarse también a España, donde el 78% de las familias tiene una vivienda en propiedad. Un 46% de toda la población tiene la vivienda sin hipoteca ni créditos pendientes, mientras que un 32% aún tiene que terminar de pagar la hipoteca.
Una opción que podría dar vida al mercado de la vivienda es la llegada de inmigrantes, que suelen encontrarse en la primera mitad de su vida: "El deseo de muchos de los inmigrantes recién llegados a Suiza por comprar una vivienda está sirviendo para apoyar la demanda de vivienda", asegura el informe de Credit Suisse.