Los bancos ya no ofrecen las hipotecas que ofrecían durante la burbuja, ni tampoco las que concedían, con cuentagotas, en los peores momentos de la crisis. Ahora, las entidades parecen haber aprendido la lección y rectificado en muchos aspectos. Según datos del comparador hipotecario HelpMyCash analizados por habitaclia, veamos cómo queda el panorama hipotecario a las puertas de 2016.
¿Quién tendrá acceso a una hipoteca?
Podrán conseguir una hipoteca las personas con ingresos estables y ahorros. La mayoría de bancos ya solo las conceden a clientes cuya nómina alcance los 2.000 euros mensuales, en solitario o entre todos los titulares, y que sean capaces de aportar una buena cantidad de ahorros como entrada. En concreto, como las entidades no financian más del 80 %, el cliente deberá aportar el otro 20 % (20.000 de cada 100.000 euros) más otro 10 o 15 % para gastos como la tasación, los impuestos o el notario. Es decir, para conseguir una hipoteca de 100.000, el cliente deberá ser capaz de aportar entre 30.000 y 35.000 euros en el momento de la firma.
¿Qué intereses aplicarán?
Según el comparador, el interés que ofrecerán los bancos en 2016 oscilará entre euríbor + 0,99 % y euríbor + 1,50 % si el cliente acepta la vinculación requerida por el banco; y entre euríbor + 2 % y euríbor + 2,50 % si el cliente no acepta contratar los seguros en la entidad que le concede el crédito.
Además, a causa del bajo euríbor, los bancos seguirán intentando colocar hipotecas a interés fijo y mixto que les permitan ingresar más dinero a corto plazo. Eso sí, los tipos fijos de estas hipotecas serán los más bajos de la historia; entre el 1,80 % y el 4 %.
Por otra parte, las hipotecas ya contratadas seguirán pagando un interés bajo comparado con años anteriores, dado que el euríbor cotiza en su mínimo histórico (0,079 % al cierre de noviembre) y los expertos no prevén ninguna subida drástica del índice al menos en la primera mitad de 2016, debido en gran parte a que el Banco Central Europeo sigue con sus políticas de tipos bajos (0,05 % desde septiembre de 2014).
¿Qué vinculación exigirán los bancos?
Al contratar una hipoteca, la vinculación incuestionablemente obligatoria será, como hasta ahora, la domiciliación de la nómina. Pero, además, en la mayoría de casos se exigirá la domiciliación de varios recibos y la contratación de una tarjeta de débito o crédito con la que se deberá realizar un gasto mínimo obligatorio.
En cuanto a los seguros, si bien no serán "obligatorios", sí determinarán en gran parte el tipo de interés a aplicar. Los dos más importantes serán, como hasta ahora, el seguro de vida (cuyo precio oscila de media entre los 150 y los 400 euros anuales) y el seguro de hogar (entre los 130 y los 200 euros de coste medio).
¿Qué comisiones encontraremos?
En las hipotecas a tipo variable seguirá siendo fácil encontrar ofertas sin comisión de apertura, mientras que en las de tipo fijo o mixto será más frecuente que nos apliquen una comisión del 1 % nada más firmar.
Las comisiones máximas en caso de subrogación o amortización anticipada parcial de la hipoteca serán del 0,5 %. Y seguiremos viendo hipotecas que se ofertan totalmente libres de comisiones.
¿Cuáles son las mejores hipotecas de 2016?
El comparador HelpMyCash pone a disposición de los usuarios sus rankings de hipotecas y su guía gratuita "Cómo pedir hipoteca al banco", para ayudar a que los interesados encuentren y negocien la mejor hipoteca del momento.