Barcelona se ha convertido en la primera ciudad española que permite a sus ciudadanos conocer qué posibilidades tiene su edificio de generar energía con la implantación de renovables. No en vano, esta ciudad consume actualmente unos 17.000 GWh/año, de los que unos 370 ya se producen con energías renovables y residuales.
Desarrollado por la empresa Tecnogeo (grupo Absis) para el consistorio catalán, este mapa visor es una herramienta de consulta donde cada ciudadano puede localizar su cubierta y obtener unos datos orientativos sobre la viabilidad o no para implantar una estación termosolar, fotovoltaica y minieólica.
"El cálculo de potencial de generación de cada cubierta se ha hechoen base al recurso disponible (radiación solar o viento disponible), lasuperfície con recurso, la tipología (plana o inclinada) y latecnología propuesta (solar térmica, fotovoltaica, minieólica). "Por lo que respecta a la tecnología, en los tres casos se han considerado rendimientos medios que hoy por hoy se encuentran en el mercado", aseguran desde el Ayuntamiento de Barcelona.
Laia Igual, jefe de proyecto de Tecnogeo, añade que el visor permite obtener datos de rendimiento como la viabilidad de implantación de cada una de las instalaciones y costes de instalación y mantenimiento, además del ahorro económico o en emisiones de CO2. Un trabajo que se ha desarrollado en tres meses.
Un ahorro considerable
Para hacernos una idea del enorme potencial energético que tienen las azoteas de la Ciudad Condal, de implantarse tecnología solar térmica en todas las superficies óptimas, el rendimiento sería de 5.495 GWh/año. "Este valor equivale al consumo anual de agua caliente sanitaria de aproximadamente 4.000 piscinas olímpicas", apuntan fuentes del consistorio. Mientras, el potencial de fotovoltaica es de 1.191 GWh/año, que podría generar del orden del 50% del consumo eléctrico que en el sector doméstico tuvo Barcelona durante 2012.
Estos dos recursos cuentan con la ventaja de que están uniformemente distribuidos a lo largo y ancho de la ciudad, y, por tanto, según fuentes del Ayuntamiento, "la potencialidad de cada azotea o cubierta dependerá de las sombras que ejerzan los edificios colindantes y no de una zona geográfica concreta". "También debemos tener en cuenta que la solar térmica y la solar fotovoltaica ocupan el mismo espacio (zonas de la cubierta con acceso al sol), por lo que no se puede hacer la suma de ambos potenciales ya que entraríamos en un conflicto a nivel de espacios", señala un portavoz municipal.
La minieólica, sin embargo, sí que podría sumarse a cualquiera de las dos tecnologías anteriores y, de hecho, apuntan desde el consistorio, "resulta muy interesante la hibridación de estas tecnologías, combinando los aerogeneradores con instalaciones fotovoltaicas". El potencial de generación de la energía minieólica es de 3,44 GWh/año (3,1 GWh/año se generarían en cubierta y 0,35 GWh/año en espacio público). "Hablamos de que podríamos producir el consumo eléctrico equivalente a 1.500 viviendas tipo, de 80 m2 y 3 dormitorios", calculan fuentes del Ayuntamiento.
En el caso de este tipo de energía, al tratarse de un recurso no uniformemente distribuido en la ciudad, las azoteas más adecuadas para este tipo de instalaciones son aquellas que geográficamente están ubicadas en las zonas próximas a Collserola, a los Tres Turons y a primera línea de mar. Solo con mirar el mapa a vista de pájaro ya se identifica que las zonas que se encuentran a más altitud son las que presentan mayor aptitud para emplazar instalaciones minieólicas.
A través del plan minieólica, el Ayuntamiento de Barcelona ha empezado a instalar aerogeneradores en el espacio público. "Nuestro objetivo final es poder dar una visión de viabilidad en el uso de esta tecnología para generar energía -allí donde exista el recurso- y, por tanto, pueda plantearse como un elemento de generación local de energía", sostiene. También pretende que esta energía eléctrica generada pueda ser consumida directamente por el mismo edificio en el que se ha ocupado la cubierta. "Generar energía localmente para el autoconsumo es una baza muy interesante pues permite reducir el consumo de energía procedente del exterior, ahorrar en la factura eléctrica y mejorar la calidad de vida de la ciudad", añaden fuentes del consistorio. Esta realidad debe permitir que a medio plazo el sector privado sea el primer interesado en hacer este tipo de inversiones.
Desde Tecnoegeo apuntan que, además de Barcelona, otras ciudades se han interesado por este mapa visor energético, perfectamente extrapolable: "Especialmente aquellas urbes que están desarrollando propuestas y proyectos en el marco de lassmartcity", apunta Igual.
Ayudas y bonificaciones
Una vez que el ciudadano ha detectado qué tipo de energía es la más óptima para instalar en su cubierta, el Ayuntamiento de Barcelona dispone de diferentes ayudas de rehabilitación en edificios y que afectan a mejoras energéticas. Por lo que respecta a la generación de renovables, se contemplan ayudas del 50% yhasta un máximo de 60.000 euros para nuevas instalaciones solares térmicas y fotovoltaicas que no estén obligadas por normativa. También se pueden acoger a esta ayuda aquellas comunidades de propietarios que rehabiliten instalaciones solares térmicas en mal estado.
Asimismo, la Ordenanza Fiscal de Barcelona prevé la bonificación de un porcentaje del IBI para aquellos bienes inmuebles dedicados a vivienda en los que se hayan instalado sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía solar. "No obstante", advierte el Ayuntamiento, "no se concederá la bonificación cuando la instalación de los sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía proveniente del sol sea obligatoria, de acuerdo con la normativa específica en la materia".
Adicionalmente a la publicación de los mapas de recurso, Barcelona ha lanzado el Asesor Energético, una plataforma interactiva de visualización del consumo eléctrico, donde los usuarios que se apunten de manera voluntaria dispondrán de los consumos horarios de su vivienda a través del móvil o de un ordenador. En estos casos, el Ayuntamiento instala de manera gratuita un dispositivo en la vivienda de los usuarios interesados.
En el plano legislativo, Barcelona está trabajando también en una nueva Ordenanza en la que se prevé exigir un consumo global máximo de energía y a su vez contribuir con una parte mediante energía renovable. "Esto permitirá construir edificios de bajo consumo energético con la libertad de que sean los proyectistas y promotores los que escojan la solución que mejor se adapta a las necesidades del edificio", concluyen desde el Ayuntamiento de la Ciudad Condal.
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Fuente: http://www.elmundo.es/