Casas rústicas: una arquitectura cálida y siempre acogedora



Muchos piensan en ellas para cuando llegue el retiro; otros para descansar los fines de semana; y otros hasta se plantean vivir en ellas como residencia permanente por lejos que puedan estar de la ciudad. Son las casas rústicas. 

Como recuerda el canal de decoración y reformas de Fotocasa, ya sea en el campo, en la montaña o en el interior de un pueblo, las casas rurales desprenden calidez y serenidad. En ellas la palabra hogar se escribe con mayúsculas, como muestran estas fotografías. Es lo que ahora llamamos calidad de vida.  


 La arquitectura 
Las casas rústicas suelen ser construcciones de poca altura, normalmente de una o dos plantas, pero con zonas exteriores como terrazas, jardines, campos... También, muchas veces, cuentan con agradables patios interiores.

 Los materiales 
Se utilizan materiales como la piedra en las paredes, la madera en suelos, vigas vistas o puertas, la cerámica… Muchas veces hallamos la huella del tiempo, que decora y da calidez y, cuando no, están los acabados envejecidos de manera artificial.

 El mobiliario
 Las casas rústicas se llenan de muebles realizados en materiales naturales. Se procuran las formas suaves, sin aristas, y el diseño relajado. La cuestión es crear ambientes cálidos y naturales.

 Los colores
No pueden faltar los colores cálidos. Blancos, amarillos, marrones y otros tonos terrosos que, combinados con textiles como alfombras, mantas, cojines o cortinas, crearán ese toque cálido y acogedor.

 Las cocinas
 Las cocinas son las grandes protagonistas de las casas rústicas. Lejos de las cocinas en “L” o como pasillos de los pisos de ciudad, aquí –normalmente con más espacio– toda la familia puede compartir tiempo y espacio. Madera, acabados naturales y tonos pastel como amarillos o azules, además de alacenas, campanas decorativas y viejos utensilios que si ya no sirven siempre decoran.  

 Los baños 
La madera, el mármol o la piedra están muy presentes. Podemos encontrarlos en muebles encimeras, paredes, suelos y hasta duchas. En cuanto a la decoración, jarrones, jabones, espejos, toallas y alfombras nos ayudarán a aumentar esa imagen.

 Los dormitorios

 Buscando un clima hogareño y cálido, en las habitaciones cremas, marrones y tonos neutros como los blancos o grises se combinan con materiales como la madera o la forja. En cuanto a los tejidos, el algodón y la lana aportarán ese toque natural que tanto gusta.

 Las zonas exteriores
 El estilo rústico está altamente conectado con la naturaleza, por eso las zonas exteriores son tan importantes. Patios interiores o exteriores, jardines, campo, porches o terrazas son algunos de los espacios que podemos disfrutar. 

Fuente: http://www.20minutos.es/
 
Vuelos Baratos