La fuerte caía de la venta de viviendas es el reflejo de la actual situación de las economías domésticas. Desde que estallase la burbuja inmobiliaria, el negocio hipotecario, y el sector en su conjunto, se ha visto fuertemente perjudicado principalmente por "el desempleo seguido muy de cerca por la falta de financiación", explica Ángel Berges, consejero delegado de AFI.
El propio Berges añade que "sin crecimiento macroeconómico, y por tanto, cierta reactivación del empleo, no se reactivará este sector, y por tanto no lo hará la macroeconomía".
Banca, sector promotor y Administración estuvieron presentes en la primera de una serie de mesas redondas organizadas por Unidad Editorial en colaboración con la Fundación Vía Célere y en la que trataron de perfilar el nuevo modelo de la vivienda debatiendo la situación actual y las expectativas de futuro del sector inmobiliario.
"Es necesaria una refundación del sector", dijo afirma Carolina Roca Castillo. La directora general de Promociones Aragonesas y presidenta de la Comisión de Vivienda de Asprima asegura que en este momento "el sector tiene problemas de liquidez y solvencia y no hay escenario de concesión de hipotecas". Según explica Roca, las asociaciones de promotores están tratando de hacer llegar a las instituciones españolas y a los organismos europeos un plan estratégico que tratará de promover reformas para lograr el fin último: un marco financiero sostenible.
Otro de los asistentes a la jornada es Juan Van-Halen, director general de Vivienda y Rehabilitación de la Comunidad de Madrid y director gerente del IVIMA. Van-Halen cree que para hablar de un nuevo modelo económico de la vivienda en el futuro es necesario abordar tres cuestiones: "financiación, alquiler y rehabilitación". Considera que en el pasado había "demasiada incertidumbre y poco estudio en cuanto a la posibilidad de la demanda". "Y eso tiene que cambiar", sentencia. "Hay que discriminar el suelo y estudiar nuevas fórmulas a través de una colaboración público/privada", añade el presidente de la promotora Vía Célere y moderador durante el encuentro, Juan Antonio Gómez Pintado.
Limitación en las compras
Los ingresos de la gran mayoría de las familias no alcanza los 40.000 euros anuales, por lo que, según un estudio de Asprima, el 80% de las familias sólo podrán adquirir viviendas en precios inferiores a los 180.000 euros. "El sector tendrá que producir viviendas que la demanda pueda comprar", asevera Roca. Según la directiva, en un futuro próximo el precio de la vivienda y la concesión de hipotecas vendrán determinados "por la renta disponible y la capacidad de endeudamiento de las familias".
Desde el punto de vista de las entidades, Santos González, presidente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), afirma que "el sistema financiero en términos crediticios recoge este escenario convulso".
La banca juega en este contexto un papel principal. Santos sostiene que el sistema financiero está pendiente de buscar sus señas de identidad, y que es necesario trabajar en la "gestión del balance, en términos de sobreendeudamiento, y la gestión del negocio, donde entran en juego los créditos". Una recomposición crediticia y el freno a la regulación por parte de los poderes públicos podrían, a su juicio, hacer ver al sector la luz al final del túnel.
Fuente: http://www.expansion.com/
El propio Berges añade que "sin crecimiento macroeconómico, y por tanto, cierta reactivación del empleo, no se reactivará este sector, y por tanto no lo hará la macroeconomía".
Banca, sector promotor y Administración estuvieron presentes en la primera de una serie de mesas redondas organizadas por Unidad Editorial en colaboración con la Fundación Vía Célere y en la que trataron de perfilar el nuevo modelo de la vivienda debatiendo la situación actual y las expectativas de futuro del sector inmobiliario.
"Es necesaria una refundación del sector", dijo afirma Carolina Roca Castillo. La directora general de Promociones Aragonesas y presidenta de la Comisión de Vivienda de Asprima asegura que en este momento "el sector tiene problemas de liquidez y solvencia y no hay escenario de concesión de hipotecas". Según explica Roca, las asociaciones de promotores están tratando de hacer llegar a las instituciones españolas y a los organismos europeos un plan estratégico que tratará de promover reformas para lograr el fin último: un marco financiero sostenible.
Otro de los asistentes a la jornada es Juan Van-Halen, director general de Vivienda y Rehabilitación de la Comunidad de Madrid y director gerente del IVIMA. Van-Halen cree que para hablar de un nuevo modelo económico de la vivienda en el futuro es necesario abordar tres cuestiones: "financiación, alquiler y rehabilitación". Considera que en el pasado había "demasiada incertidumbre y poco estudio en cuanto a la posibilidad de la demanda". "Y eso tiene que cambiar", sentencia. "Hay que discriminar el suelo y estudiar nuevas fórmulas a través de una colaboración público/privada", añade el presidente de la promotora Vía Célere y moderador durante el encuentro, Juan Antonio Gómez Pintado.
Limitación en las compras
Los ingresos de la gran mayoría de las familias no alcanza los 40.000 euros anuales, por lo que, según un estudio de Asprima, el 80% de las familias sólo podrán adquirir viviendas en precios inferiores a los 180.000 euros. "El sector tendrá que producir viviendas que la demanda pueda comprar", asevera Roca. Según la directiva, en un futuro próximo el precio de la vivienda y la concesión de hipotecas vendrán determinados "por la renta disponible y la capacidad de endeudamiento de las familias".
Desde el punto de vista de las entidades, Santos González, presidente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), afirma que "el sistema financiero en términos crediticios recoge este escenario convulso".
La banca juega en este contexto un papel principal. Santos sostiene que el sistema financiero está pendiente de buscar sus señas de identidad, y que es necesario trabajar en la "gestión del balance, en términos de sobreendeudamiento, y la gestión del negocio, donde entran en juego los créditos". Una recomposición crediticia y el freno a la regulación por parte de los poderes públicos podrían, a su juicio, hacer ver al sector la luz al final del túnel.
Fuente: http://www.expansion.com/