Conseguir una hipoteca en 2011 es más difícil y caro que hace un año. Ahora, las entidades están mucho más interesadas en captar capital que en prestarlo y, en consecuencia, conceden menos préstamos y en peores condiciones: intereses más altos, comisiones más caras, mayores requisitos…
Con una excepción, cuando intentan vendernos alguna de las viviendas que tienen en cartera. Entonces, todo son facilidades.
Según los datos de HelpMyCash.com, la gran cantidad de embargos llevados a cabo en los últimos meses ha aumentado tanto la cartera de pisos propiedad de los bancos que las entidades se ven obligadas a ofrecer muy buenas condiciones de financiación para poder darles salida.
Comprar uno de estas vivienda propiedad del banco puede ofrecernos las siguientes ventajas:
· Financiación 100%: Permite acceder a la compra de vivienda sin tener ahorros.
· Largo plazo de amortización: Hasta 50 años en algunas entidades. Devolver el préstamo en más tiempo reduce hasta un 40% la cuota mensual.
· Reducción de costes: El interés ofrecido en estas hipotecas es más bajo que el de cualquier otra hipoteca ofrecida por la misma entidad.
· Tasación gratuita: Las entidades ya tienen sus inmuebles tasados, lo que supone un ahorro para el cliente de entre 200 y 400 euros.
· Flexibilidad en el pago: Aplazamiento de cuotas, carencia inicial, primeros meses gratis… son algunas de las facilidades ofrecidas.
Entre las desventajas destacan que no podremos escoger nuestra casa fuera de la oferta de pisos de la entidad, deberemos dar por buena la tasación ya hecha por el banco, y estaremos obligados a contratar productos vinculados, como seguros, tarjetas con gasto anual obligatorio, etc.
No obstante, este último escollo es común a casi todas las hipotecas, sea cual sea el inmueble que adquiramos. Por eso, ahora, conviene mirar con lupa tanto la casa que se compra, como la hipoteca que pedimos.
Fuente: http://www.noticias.lainformacion.com/