Todo el futuro del sector constructor pasa por la rehabilitación. Todos los políticos, da igual su color, y todos los subsectores de este mercado están de acuerdo. Solo hace falta que sean capaces de consensuar un nuevo marco normativo estable para esa actividad. Primero, habrá que definir con absoluta claridad a qué debe llamarse rehabilitación y a qué regeneración integral, advierten los expertos.
"Pensemos que no solo estamos hablando de rehabilitar un edificio, nos referimos a la posibilidad de reformar barrios enteros", recuerda el director general de Valdebebas, David Martínez.
Admiten los juristas y expertos en gestión urbanística que para empezar, la regeneración integral choca frontalmente con el derecho a la propiedad, por lo que habrá que abordar cómo regularlo. Habrá que definir si se expropia a los dueños de las viviendas a derribar, si se les va a ofrecer casa en otro enclave o en el mismo, todas las opciones. Dicen los promotores que si se consigue una buena regulación al respecto, habrá cola de inversores interesados en esos proyectos. De lo contrario, nadie querrá volver a saber nada de la actividad promotora en mucho tiempo.
En materia de rehabilitación individual sí se ha avanzado. Sin ir más lejos, el plan plurianual 2009-2012 se denomina Plan de Vivienda y Rehabilitación. La última novedad es también de esta misma semana. Además de las ventajas fiscales con que ya cuentan los propietarios que se embarcan en obras de reforma o rehabilitación de sus casas, ahora se ha decidido impulsar esta actividad por el lado de la financiación. Durante su reciente comparecencia parlamentaria, el ministro José Blanco anunció la puesta en marcha de un nuevo producto financiero. Se trata de préstamos para rehabilitar vivienda que contarán con los mismos tipos de interés bajos que las hipotecas, pero se tramitarán de forma más sencilla y ágil, como lo hacen los créditos personales. Ahora, según los expertos, resta por hacer el mismo esfuerzo de imaginación para incentivar la entrada de inversores en esta actividad.
Fuente: http://www.cincodias.com/
"Pensemos que no solo estamos hablando de rehabilitar un edificio, nos referimos a la posibilidad de reformar barrios enteros", recuerda el director general de Valdebebas, David Martínez.
Admiten los juristas y expertos en gestión urbanística que para empezar, la regeneración integral choca frontalmente con el derecho a la propiedad, por lo que habrá que abordar cómo regularlo. Habrá que definir si se expropia a los dueños de las viviendas a derribar, si se les va a ofrecer casa en otro enclave o en el mismo, todas las opciones. Dicen los promotores que si se consigue una buena regulación al respecto, habrá cola de inversores interesados en esos proyectos. De lo contrario, nadie querrá volver a saber nada de la actividad promotora en mucho tiempo.
En materia de rehabilitación individual sí se ha avanzado. Sin ir más lejos, el plan plurianual 2009-2012 se denomina Plan de Vivienda y Rehabilitación. La última novedad es también de esta misma semana. Además de las ventajas fiscales con que ya cuentan los propietarios que se embarcan en obras de reforma o rehabilitación de sus casas, ahora se ha decidido impulsar esta actividad por el lado de la financiación. Durante su reciente comparecencia parlamentaria, el ministro José Blanco anunció la puesta en marcha de un nuevo producto financiero. Se trata de préstamos para rehabilitar vivienda que contarán con los mismos tipos de interés bajos que las hipotecas, pero se tramitarán de forma más sencilla y ágil, como lo hacen los créditos personales. Ahora, según los expertos, resta por hacer el mismo esfuerzo de imaginación para incentivar la entrada de inversores en esta actividad.
Fuente: http://www.cincodias.com/
