La inmobiliaria presidida por Fernando Martín ha rebajado el número de trabajadores en un 77% desde finales de 2007 E En la sede de Alfonso Molina ya solo queda una veintena de personas.
A punto de cumplir los dos años en suspensión de pagos, Martinsa Fadesa encara la última fase del concurso de acreedores. Y los últimos resultados económicos que ha publicado muestran una ligera recuperación de sus finanzas, pese a que sigue con unas deudas de 7.000 millones. En el primer trimestre tuvo unas pérdidas de 3 millones, frente a los 27 de mismo período del año anterior, un 90% menos.
Las causas de esta rebaja son dos: las menores provisiones que tuvo que realizar para hacer frente a la depreciación de sus activos inmobiliarios y el recorte de gastos.
Y en esta partida destaca una cifra reveladora: desde finales de 2007 hasta principios de 2010 la empresa se ha ahorrado en gastos de personal 48 millones de euros, según los informes que envía semestralmente a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En diciembre de 2007, 15 meses después de anunciarse la venta de la empresa y solo siete antes de entrar en suspensión de pagos, Fadesa abonaba a sus empleados 70,4 millones. En enero, esta cantidad se había reducido a 22,4. La causa de esta rebaja son los continuos recortes de plantilla desde que se anunció la venta de la firma en septiembre de 2006.
En junio de 2007 la plantilla de la inmobiliaria rozaba los 1.300 empleados, de los que 400 trabajaban en la sede de Alfonso Molina. Ahora ya quedan menos de 300 en toda España, un descenso del 77%, de los que solo una veintena permanecen en A Coruña.
Las constantes reducciones de plantilla en Fadesa son consecuencia del ajuste de costes que incluía el plan de viabilidad elaborado por Deloitte. Para Martinsa, acomodar el personal y los gastos de estructura a lo "estrictamente necesario" era, y sigue siendo, una de las premisas de su plan de viabilidad para el periodo 2008-2016, presentado el 30 de diciembre de 2008 en el Juzgado Mercantil de A Coruña.
Cuando en septiembre de 2006, Manuel Jove pactó con Fernando Martín la venta de Fadesa por 4.000 millones, más de 500 personas abarrotaban el edificio central en A Coruña. Desde aquel día hasta hoy la plantilla coruñesa se ha reducido en un 94%.
Casi al día siguiente de que ambos empresarios sellaran su acuerdo comenzó un continuo goteo de bajas -despidos, traslados y renuncias voluntarias- que han rebajado el número de trabajadores hasta la mínima expresión. Solo de octubre a diciembre de ese año, más de un centenar de empleados pidieron al finiquito. Cuando el 15 de marzo Jove realizó el traspaso oficial de poderes a Martín, la plantilla coruñesa ya rondaba los 240 trabajadores, la mitad que medio año antes.
Llegaron entonces los traslados a Madrid, más bajas voluntarias, la suspensión de pagos (julio de 2008) y el primer Expediente de Regulación de Empleo (agosto) que afectó a 74 trabajadores y al que se adhieren otros 40 más en septiembre. En aquel momento, la inmobiliaria se comprometió a "poner todos los medios a su alcance" para garantizar el mantenimiento de la plantilla tras el ERE. A nivel nacional, la extinción colectiva de contratos afectó a 233 personas, a las que posteriormente se sumaron otras 79.
En febrero de 2009, la empresa volvió a presentar otro ERE, que incluyó a 259 empleados, de los que 62 eran de A Coruña. En marzo fue aprobado por los trabajadores. El coste total de ambas regulaciones de empleo (595 personas) ascendió a 12,4 millones de euros. El primero fue de 6,1 y el segundo, de 6,3. Ahora, la plantilla de Fadesa en la sede de A Coruña ya casi no alcanza la veintena de personas.
Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/
A punto de cumplir los dos años en suspensión de pagos, Martinsa Fadesa encara la última fase del concurso de acreedores. Y los últimos resultados económicos que ha publicado muestran una ligera recuperación de sus finanzas, pese a que sigue con unas deudas de 7.000 millones. En el primer trimestre tuvo unas pérdidas de 3 millones, frente a los 27 de mismo período del año anterior, un 90% menos.
Las causas de esta rebaja son dos: las menores provisiones que tuvo que realizar para hacer frente a la depreciación de sus activos inmobiliarios y el recorte de gastos.
Y en esta partida destaca una cifra reveladora: desde finales de 2007 hasta principios de 2010 la empresa se ha ahorrado en gastos de personal 48 millones de euros, según los informes que envía semestralmente a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En diciembre de 2007, 15 meses después de anunciarse la venta de la empresa y solo siete antes de entrar en suspensión de pagos, Fadesa abonaba a sus empleados 70,4 millones. En enero, esta cantidad se había reducido a 22,4. La causa de esta rebaja son los continuos recortes de plantilla desde que se anunció la venta de la firma en septiembre de 2006.
En junio de 2007 la plantilla de la inmobiliaria rozaba los 1.300 empleados, de los que 400 trabajaban en la sede de Alfonso Molina. Ahora ya quedan menos de 300 en toda España, un descenso del 77%, de los que solo una veintena permanecen en A Coruña.
Las constantes reducciones de plantilla en Fadesa son consecuencia del ajuste de costes que incluía el plan de viabilidad elaborado por Deloitte. Para Martinsa, acomodar el personal y los gastos de estructura a lo "estrictamente necesario" era, y sigue siendo, una de las premisas de su plan de viabilidad para el periodo 2008-2016, presentado el 30 de diciembre de 2008 en el Juzgado Mercantil de A Coruña.
Cuando en septiembre de 2006, Manuel Jove pactó con Fernando Martín la venta de Fadesa por 4.000 millones, más de 500 personas abarrotaban el edificio central en A Coruña. Desde aquel día hasta hoy la plantilla coruñesa se ha reducido en un 94%.
Casi al día siguiente de que ambos empresarios sellaran su acuerdo comenzó un continuo goteo de bajas -despidos, traslados y renuncias voluntarias- que han rebajado el número de trabajadores hasta la mínima expresión. Solo de octubre a diciembre de ese año, más de un centenar de empleados pidieron al finiquito. Cuando el 15 de marzo Jove realizó el traspaso oficial de poderes a Martín, la plantilla coruñesa ya rondaba los 240 trabajadores, la mitad que medio año antes.
Llegaron entonces los traslados a Madrid, más bajas voluntarias, la suspensión de pagos (julio de 2008) y el primer Expediente de Regulación de Empleo (agosto) que afectó a 74 trabajadores y al que se adhieren otros 40 más en septiembre. En aquel momento, la inmobiliaria se comprometió a "poner todos los medios a su alcance" para garantizar el mantenimiento de la plantilla tras el ERE. A nivel nacional, la extinción colectiva de contratos afectó a 233 personas, a las que posteriormente se sumaron otras 79.
En febrero de 2009, la empresa volvió a presentar otro ERE, que incluyó a 259 empleados, de los que 62 eran de A Coruña. En marzo fue aprobado por los trabajadores. El coste total de ambas regulaciones de empleo (595 personas) ascendió a 12,4 millones de euros. El primero fue de 6,1 y el segundo, de 6,3. Ahora, la plantilla de Fadesa en la sede de A Coruña ya casi no alcanza la veintena de personas.
Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/

