El Ayuntamiento aprobó en agosto de 2007 la concesión de las subvenciones para aislar las viviendas del Orzán del ruido que se genera, sobre todo los fines de semana, durante la movida nocturna juvenil. Sin embargo, el inicio del periodo para solicitar las ayudas se demoró dos años y, al final, tampoco tuvo el éxito esperado ni por el Gobierno municipal ni por la asociación vecinal del barrio, pues la Concejalía de Medio Ambiente sólo recibió seis solicitudes. Como el departamento de Nieves Vázquez se ha quedado lejos de agotar los 120.000 euros presupuestados para este proyecto, se abrirá esta primavera un segundo plazo.
La previsión de la Concejalía de Medio Ambiente es aprobar en la próxima Junta de Gobierno Local -fijada para el viernes 23 de abril- una segunda convocatoria para cambiar las ventanas de las casas y agotar el crédito acordado para esta iniciativa. Las ayudas municipales se circunscriben a 55 calles, ubicadas entre la playa del Orzán y el puerto interior, las más afectadas por el ocio nocturno y el ruido que genera.
Según las estimaciones del Concello, se trata de un área que comprende a 5.000 vecinos. En el plazo que abrió en diciembre se estableció que la cuantía máxima que podía percibir el propietario de un piso era del 25% del coste de la reforma, hasta un tope de 2.000 euros. Las obras consistirán en cambiar los ventanales o reforzarlos y en mejorar el aislamiento acústico de las fachadas de los edificios. Entonces, la expectativa generada por el Ayuntamiento era tan grande que llegó a comprometerse a crear una lista de espera de un año si los 120.000 euros presupuestados no eran suficientes para atender la demanda de ayudas para el aislamiento de las viviendas del Orzán.
Fuente: http://www.laopinioncoruna.es/
La previsión de la Concejalía de Medio Ambiente es aprobar en la próxima Junta de Gobierno Local -fijada para el viernes 23 de abril- una segunda convocatoria para cambiar las ventanas de las casas y agotar el crédito acordado para esta iniciativa. Las ayudas municipales se circunscriben a 55 calles, ubicadas entre la playa del Orzán y el puerto interior, las más afectadas por el ocio nocturno y el ruido que genera.
Según las estimaciones del Concello, se trata de un área que comprende a 5.000 vecinos. En el plazo que abrió en diciembre se estableció que la cuantía máxima que podía percibir el propietario de un piso era del 25% del coste de la reforma, hasta un tope de 2.000 euros. Las obras consistirán en cambiar los ventanales o reforzarlos y en mejorar el aislamiento acústico de las fachadas de los edificios. Entonces, la expectativa generada por el Ayuntamiento era tan grande que llegó a comprometerse a crear una lista de espera de un año si los 120.000 euros presupuestados no eran suficientes para atender la demanda de ayudas para el aislamiento de las viviendas del Orzán.
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