El Ministerio de Economía y Hacienda ingresará 232 millones de euros anuales por el recorte a partir de 2011 de la deducción por vivienda habitual en el IRPF, que afectará a 323.000 contribuyentes, según la incidencia recaudatoria de las medidas tributarias contenidas en el anteproyecto de Ley de Economía Sostenible.
A partir de enero de 2011, se modifica la deducción por adquisición de vivienda habitual, limitándola a las rentas inferiores a 24.107,20 euros. Cuando la base imponible sea inferior a los 17.707,20 euros, se mantiene la situación actual, lo que permite una deducción en cuota del 15% de las cantidades pagadas en un año, con un límite de 9.040 euros al año. Entre los 17.707,20 y los 24.107,20 euros de base imponible se aplicará una reducción gradual de forma lineal.
Por su parte, la mejora de la reducción de las rentas del arrendamiento también a partir de 2011, que pasa del 50% al 60%, afectará a 702.000 contribuyentes y tendrá un coste para la Hacienda Pública de 85 millones de euros. No obstante, se reduce de 35 a 30 años la edad del arrendatario a efectos de la exención del 100 por 100 de las rentas de alquiler.
La equiparación fiscal de la deducción por alquiler respecto de la deducción por compra de vivienda es otra de las medidas que han incorporado a la Ley de Economía Sostenible. Así, a partir del 1 de enero de 2011, el arrendatario se podría deducir el 10,05% de los pagos de alquiler hasta un máximo de 9.040 euros si su renta es inferior a 17.707 euros. Entre 17.707,20 y 24.107,20 euros se reducirá gradualmente la base de la deducción, y los contribuyentes con bases imponibles superiores a 24.107,20 euros no podrán aplicarse la deducción.
Esta medida, calcula Hacienda, beneficiará a 302.000 contribuyentes y las arcas públicas dejarán de ingresar por ello unos 20 millones de euros.
También en el IRPF, la nueva deducción por obras en la vivienda habitual, incorporada igualmente en el anteproyecto de Ley de Economía Sostenible, beneficiará a 4 millones de contribuyentes, según las estimaciones del Gobierno, que prevé una merma de ingresos de 1.200 millones de euros.
En concreto, a partir de la entrada en vigor de la Ley de Economía Sostenible se establece una nueva deducción en el IRPF del 10% para las obras relacionadas con la eficiencia energética, el uso del agua o la adaptación a personas con movilidad reducida que se realicen en las viviendas antes del 31 de diciembre de 2012.
La base anual máxima de deducción será de 3.000 euros y estará limitada en función de la base imponible del contribuyente, siguiendo los mismos tramos establecidos en la deducción por compra de vivienda habitual. Además, el límite máximo plurianual por vivienda será de 10.000 euros.
En el Impuesto sobre Sociedades, se ha introducido a partir de la entrada en vigor de la ley una nueva deducción por actividades de innovación tecnológica, que pasa del 8% actual al 12% y que incrementa el límite máximo de deducción, que pasa a ser el 60% de la cuota íntegra minorada (hasta ahora el 50%) en los casos en los que la inversión en I+D+i sea significativa (de importe superior al 10 por 100 de la cuota íntegra del ejercicio).
La nueva deducción beneficiará, según Hacienda, a 3.000 declarantes de este impuesto y tendrá un coste de unos 30 millones de euros.
En la misma línea, el mantenimiento de la deducción en el Impuesto sobre Sociedades por inversiones medioambientales (se mantiene con carácter indefinido, a pesar de que estaba previsto que desapareciera en el año 2011 y el porcentaje de deducción pasará del 4% al 8%) afectará a 6.000 contribuyentes, que se ahorrarán 95 millones de euros.
Fuente: http://www.europapress.es/